Los cinco tipos de consumidor de la actualidad
<p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%"> Hasta el momento, 2020 ha sido un año diferente a todo lo esperado. Prácticamente nadie ha podido hacer previsiones claras acerca de lo que iba a ocurrir y cómo salir de ello. </p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%">La crisis sanitaria del coronavirus y los efectos que ha tenido en la sociedad, la economía o el consumo lo han cambiado todo por completo. Esto obliga a las marcas y a las empresas a replantearse qué hacen y cómo para lograr sobrevivir a esta situación.</p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%">El paso de los meses y la experiencia han ayudado a comprender mejor qué suponen los cambios. La llamada nueva normalidad ha creado un nuevo contexto y la resaca de los meses más duros del confinamiento a nivel global ha modificado la vida de las personas y su relación con las marcas.</p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%">Se podría decir que lo que sabíamos de los consumidores en enero ya no es exactamente válido para comprender qué hacen y cómo son en septiembre. Ellos y su relación con las marcas han mutado, como demuestra un <a href="https://www.puromarketing.com/index.php?mod=news&amp;op=link&amp;id=34093&amp;url=https://www.warc.com/newsandopinion/news/understanding-five-consumer-segments-for-covid-19/44038" target="_blank"><font color="#0000ff">estudio</font></a> de Ipsos que, partiendo de una muestra de consumidores estadounidense, ha perfilado los cinco tipos de consumidores que hay ahora mismo en el mercado.</p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%">Lo que los diferencia es su grado de preocupación por la crisis sanitaria (la lista que sigue va de menos a más preocupación) pero también la situación económica en la que lo afrontan. Partiendo de eso, lo que esperan de las marcas y de las compañías también varía.</p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%"><u>Vuelta a lo de antes</u></p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%">En el estudio, los llaman consumidores centrados en la libertad (algo que, teniendo en cuenta que el análisis parte de una base estadounidense, tiene cierta lógica). Son consumidores centrados en volver a lo de antes. Es lo que quieren y es lo que determina su consumo. </p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%">Se preocupan poco por la situación actual y quieren que las cosas vuelvan al modo prepandemia. No buscan la nueva normalidad, sino la normalidad "de siempre". Son el 10% de los consumidores.</p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%"><u>Los que se acomodan fácilmente</u></p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%">No les preocupa tanto la crisis sanitaria como la crisis económica. Su nivel de preocupación por el impacto del coronavirus es más bien bajo, pero sí se fijan en el impacto financiero. Son el 25% de los consumidores.</p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%"><u>Los normales imperturbables</u></p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%">Son el 17% de los consumidores. Lo que les preocupa es la enfermedad y no tanto la economía. Su preocupación por el impacto del Covid-19 está entre "tibio a medio", pero su situación económica es positiva. </p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%">Cuentan con una “fuerte” seguridad financiera. Esto hace que sean consumidores que siguen las normas sanitarias cuando están obligados a hacerlo, pero intentan mantener una cierta sensación de normalidad, al menos en sus patrones de consumo. Es, por ejemplo, el cliente que usa el barbijo, pero elige actividades en ámbitos públicos, como hacía antes.</p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%"><u>Los luchadores preocupados</u></p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%">Son, por porcentaje, el segundo grupo más amplio de los consumidores, tras los consumidores que se acomodan fácilmente a la situación. El 21% entraría en esta categoría, formado por aquellos que están viendo su situación personal más afectada por el contexto. </p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%">Son quienes sufren más la crisis, tanto sanitaria como financiera. Por ello, están muy preocupados por el impacto que podría tener en sus vidas el hecho de enfermarse, con consecuencias para su economía personal.</p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%">Además, este grupo no tiene los ahorros necesarios para apoyarse en ellos como resguardo, lo que complica mucho más su situación. Ahora mismo son los consumidores más preocupados por disponibilidad de productos y precios.</p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%"><u>Los ahorradores conmocionados</u></p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%">Como el anterior grupo, están preocupados por el coronavirus. Son, de hecho, quienes más preocupados están y quienes están más implicados en términos de protección y seguridad vinculados a la salud. </p> <p align="justify" style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%">Sin embargo, y a diferencia del grupo anterior, cuentan con una seguridad financiera lo suficientemente firme como para sentir que pueden acomodarse sin problemas al complicado futuro. Esto es, están preocupados, pero tienen una red de seguridad. Son el 19%.</p> <p style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%"><br> </p> <p style="margin-bottom: 0cm; line-height: 100%">Fuente: Puro Marketing.</p><br>
04 | SEP | 2020

Hasta el momento, 2020 ha sido un año diferente a todo lo esperado. Prácticamente nadie ha podido hacer previsiones claras acerca de lo que iba a ocurrir y cómo salir de ello.

La crisis sanitaria del coronavirus y los efectos que ha tenido en la sociedad, la economía o el consumo lo han cambiado todo por completo. Esto obliga a las marcas y a las empresas a replantearse qué hacen y cómo para lograr sobrevivir a esta situación.

El paso de los meses y la experiencia han ayudado a comprender mejor qué suponen los cambios. La llamada nueva normalidad ha creado un nuevo contexto y la resaca de los meses más duros del confinamiento a nivel global ha modificado la vida de las personas y su relación con las marcas.

Se podría decir que lo que sabíamos de los consumidores en enero ya no es exactamente válido para comprender qué hacen y cómo son en septiembre. Ellos y su relación con las marcas han mutado, como demuestra un estudio de Ipsos que, partiendo de una muestra de consumidores estadounidense, ha perfilado los cinco tipos de consumidores que hay ahora mismo en el mercado.

Lo que los diferencia es su grado de preocupación por la crisis sanitaria (la lista que sigue va de menos a más preocupación) pero también la situación económica en la que lo afrontan. Partiendo de eso, lo que esperan de las marcas y de las compañías también varía.

Vuelta a lo de antes

En el estudio, los llaman consumidores centrados en la libertad (algo que, teniendo en cuenta que el análisis parte de una base estadounidense, tiene cierta lógica). Son consumidores centrados en volver a lo de antes. Es lo que quieren y es lo que determina su consumo.

Se preocupan poco por la situación actual y quieren que las cosas vuelvan al modo prepandemia. No buscan la nueva normalidad, sino la normalidad "de siempre". Son el 10% de los consumidores.

Los que se acomodan fácilmente

No les preocupa tanto la crisis sanitaria como la crisis económica. Su nivel de preocupación por el impacto del coronavirus es más bien bajo, pero sí se fijan en el impacto financiero. Son el 25% de los consumidores.

Los normales imperturbables

Son el 17% de los consumidores. Lo que les preocupa es la enfermedad y no tanto la economía. Su preocupación por el impacto del Covid-19 está entre "tibio a medio", pero su situación económica es positiva.

Cuentan con una “fuerte” seguridad financiera. Esto hace que sean consumidores que siguen las normas sanitarias cuando están obligados a hacerlo, pero intentan mantener una cierta sensación de normalidad, al menos en sus patrones de consumo. Es, por ejemplo, el cliente que usa el barbijo, pero elige actividades en ámbitos públicos, como hacía antes.

Los luchadores preocupados

Son, por porcentaje, el segundo grupo más amplio de los consumidores, tras los consumidores que se acomodan fácilmente a la situación. El 21% entraría en esta categoría, formado por aquellos que están viendo su situación personal más afectada por el contexto.

Son quienes sufren más la crisis, tanto sanitaria como financiera. Por ello, están muy preocupados por el impacto que podría tener en sus vidas el hecho de enfermarse, con consecuencias para su economía personal.

Además, este grupo no tiene los ahorros necesarios para apoyarse en ellos como resguardo, lo que complica mucho más su situación. Ahora mismo son los consumidores más preocupados por disponibilidad de productos y precios.

Los ahorradores conmocionados

Como el anterior grupo, están preocupados por el coronavirus. Son, de hecho, quienes más preocupados están y quienes están más implicados en términos de protección y seguridad vinculados a la salud.

Sin embargo, y a diferencia del grupo anterior, cuentan con una seguridad financiera lo suficientemente firme como para sentir que pueden acomodarse sin problemas al complicado futuro. Esto es, están preocupados, pero tienen una red de seguridad. Son el 19%.


Fuente: Puro Marketing.