A la vida del negocio fÃsico (local tradicional), todavÃa le queda mucho recorrido por delante, a pesar del impacto del comercio electrónico y consumidores cada vez más familiarizados con las compras online.
Una de las claves para mantenerse competitivos es lograr un
equilibrio entre la presencia online y la offline parece el camino a seguir, y
hay que hacerlo de forma inteligente y coherente con cada modelo de negocio.
Los clientes han adaptado su forma de
comprar. Primero quieren informarse y leer opiniones, y recién después acuden
al comercio fÃsico a ver y tocar el producto. Está comprobado que siete de cada diez
compradores buscan online, pero compran en
tiendas fÃsicas. Esta es sólo una de las ventajas que
aún conserva la tienda fÃsica.
La gran ventaja que tienen los comercios de toda la vida es el gran
inconveniente del online para muchos consumidores: la posibilidad de ver y
tocar los productos. El minorista debe aprovecharse de ello, destacando
sus atributos diferenciales:
1. Productos cuidados, en stock y organizados.
El cliente que busca en internet y luego
compra en directo desea que al llegar a la tienda los productos estén
disponibles. Una buena idea es disponer de una zona para probar los productos. O
contar con personal especializado, que asesore y aconseje al cliente.
2. Asesoramiento
experto.
La comunicación y atención al cliente
de las tiendas online es uno de los puntos que toda marca desea
mejorar y optimizar. En los comercios esto no hace falta, ya que el personal está
acostumbrado a atender al público. Las ventajas competitivas incluyen el trato
cercano, de persona a persona, y un consejo experto y comprensivo.
3. Información
de los productos.
Suele ser mucho más completa con el producto en la mano. Online, las descripciones muchas veces están más pendientes del SEO que de responder a la necesidad básica del cliente.
4. Personalización.
Este concepto es también uno de los más comunes, buscados y
deseados por cualquier marca. Todo es más bonito cuando sabemos que está hecho
solo para nosotros. En los negocios de barrio, cuando nos atienden somos los
protagonistas y nos ofrecen productos o servicios solo para nosotros, sin tener
que responder a cuestionarios online o levantar una tecla.
Una mejor experiencia de compra mejora la
vida de la tienda fÃsica. El ecommerce se esfuerza por replicar el âlo compro, y
me lo llevoâ y ofrecer tiempos de entrega mÃnimos, pero por ahora es imposible realizar
una compra online y tenerla en casa instantáneamente. Por eso es tan importante
para la tienda fÃsica la gestión del stock y proporcionar al cliente aquello
que quiere en el menor tiempo posible y de la mejor manera.
Con el fin de preservar la actividad comercial en una ciudad o región, los negocios fÃsicos y sus versiones online deben lograr un equilibrio, aprovechar sinergias y trabajar para que la experiencia de compra del cliente y el comercio en general se vean beneficiados.
Fuente: Bolsalea.