Una pyme comercial que decide implementar prácticas sustentables en sus procesos y gestión cotidiana no sólo resulta atractiva para los consumidores que valoran esos atributos.
En términos de rendimiento y operaciones la reducción de costos, el aumento de productividad, la flexibilidad de inversión en capital y la mejora del clima laboral son algunas de las ventajas que puede obtener.
1. Instalaciones y experiencia de
cliente
Una temperatura ambiente idónea favorece la productividad del empleado. Del mismo modo, contribuye a generar una experiencia de cliente mejorada, que aumenta la duración de la permanencia en el local.
2. Telecontrol o telegestión
Este sistema, que monitorea de forma remota, permite regular y gestionar las instalaciones de calefacción, iluminación o ventilación, entre otras, de manera más eficiente.
3. AuditorÃas energéticas
Un estudio completo de las instalaciones proporciona información objetiva sobre la energÃa consumida. Contempla tanto aspectos técnicos como económicos que influyen en el consumo energético.
4. Puesta a punto
Fijando objetivos concretos se proporciona mucha información del estado de las instalaciones. Esto permite prever fallos y averÃas, consiguiendo de esta manera grandes ahorros y elevando el nivel de eficiencia de los equipos.
5. TelemetrÃa
El despliegue de sensores como los que utiliza la Internet de las Cosas genera información de consumos y de las variables que utilizan: temperatura externa, temperatura interna, humedad, etc. La información se digitaliza, se analiza y se diseñan acciones concretas para optimizar costos.
6. Reputación Social
Cada vez más, el consumidor final
exige un compromiso real con la preservación del medio ambiente. Hoy, reconvertir el negocio en sustentable es un requisito fundamental
para la competitividad de las empresas.